Acciones urgentes para combatir la tala ilegal en la zona Izta-Popo, exhorto de legisladores a ayuntamiento de Amecameca y dependencias estatales
Escrito por Adair Lima el 30 de noviembre de 2022
El congreso local envió un exhorto al ayuntamiento de Amecameca; así como, a la delegación estatal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), a la Protectora de Bosques del Estado de México (PROBOSQUE) y a la Guardia Nacional para que lleven a cabo acciones urgentes que combatan la tala ilegal en la región Izta-Popo.
Durante la presentación de la solicitud, la diputada Anaís Burgos indicó que, de acuerdo con PROBOSQUE, en la entidad hay cinco zonas en situación crítica por el delito de tala clandestina, lo que ha derivado en la disminución de la masa forestal, provocando daños ambientales y a la biodiversidad de las zonas que la componen.
De estas cinco zonas, la más dañada es la del Nevado de Toluca, que la conforman los municipios de Zinacantepec, Coatepec de Harinas, Almoloya de Alquisiras y Sultepec. La segunda más afectada es la región Izta-Popo.
La legisladora afirmó que el Parque Nacional Izta-Popo es una región invaluable por los servicios ambientales que proporciona, especialmente por la provisión de agua que abastece a los estados de Puebla, Tlaxcala y Morelos. Los municipios mexiquenses que forman parte del Parque Nacional son Texcoco, Ixtapaluca, Chalco, Tlalmanalco, Amecameca, Atlautla, Ecatzingo y Ozumba.
“En el estado de México, la tala ilegal de árboles es un delito cotidiano que se comete con alto índice de impunidad en muchos municipios, a pesar de que está castigado por nuestro Código Penal con sanciones que van de los 12 a los 20 años de prisión”.
Burgos, señaló que no se trata sólo de un daño medioambiental, también provoca daños patrimoniales a la entidad, ya que se considera una pérdida de 30 millones de pesos resultado de la tala aproximada de 5 mil árboles. La mayoría de las especies taladas son oyamel, pino y encino con edades de entre 30 y 60 años.
En México, de acuerdo con datos de la PROFEPA citados por la diputada, la producción de madera ilegal representa el 30 por ciento del volumen anual autorizado y está asociada a la insuficiencia operativa de la legislación forestal y ambiental, que a la vez es permitida por la corrupción en la aplicación de la justicia.
El Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl tiene una extensión total de 39,819.08 hectáreas, compartidas por los estados de México, Puebla y Morelos. En el Programa de Manejo -publicado en abril de 2013- la tala fue identificada como una de las principales amenazas y un problema recurrente en el área desde la segunda mitad del siglo pasado, llegando a una situación crítica por el aprovechamiento industrial de la fábrica de papel San Rafael y Anexas.
Otras problemáticas identificadas y registradas en el Programa son: la expansión acelerada y no controlada de la mancha urbana; los incendios forestales, la extracción de recursos naturales, flora y fauna para su comercialización; el cambio de uso de suelo para la ganadería extensiva; la instalación de tiraderos a cielo abierto; la contaminación atmosférica generada por la metrópolis; la introducción de especies ferales; el turismo desordenado, sobre todo en nevadas estacionales; entre otros factores que contribuyen a la degradación acelerada del Parque Nacional.
